10 ¿Busco acaso la aprobación de los hombres? ¿O la de Dios? ¿Intento agradar a hombres? Si todavía quisiera agradar a los hombres, no sería servidor de Cristo. 11 Les hago saber, hermanos, que la Buena Noticia que les anuncié no es de origen humano; 12 yo no la recibí ni aprendí de un hombre, sino que me la reveló Jesucristo. 13 Sin duda han oído hablar de mi anterior conducta en el judaísmo: Violentamente perseguía a la Iglesia de Dios intentando destruirla; 14 en el judaísmo superaba a todos los compatriotas de mi generación en mi celo ferviente por las tradiciones de mis antepasados. 15 Pero cuando [Dios,] quien me apartó desde el vientre materno y me llamó por su mucho amor, quiso 16 revelarme a su Hijo para que yo lo anunciara a los paganos, inmediatamente, en vez de consultar a hombre alguno 17 o de subir a Jerusalén a visitar a los apóstoles más antiguos que yo, me alejé a Arabia y después volví a Damasco. 18 Pasados tres años, subí a Jerusalén para conocer a Pedro y me quedé quince días con él. 19 De los otros apóstoles no vi más que a Santiago, el pariente del Señor. 20 En esto que les escribo Dios es testigo que no miento. 21 Más tarde me dirigí a la región de Siria y de Cilicia. 22 Las Iglesias cristianas de Judea no me conocían personalmente; 23 sólo habían oído contar: el que antes nos perseguía ahora anuncia la Buena Noticia de la fe que en otro tiempo intentaba destruir; 24 y por mi causa daban gloria a Dios. “GÁLATAS 2:10-24”
Enseñanza o Reflexión: Hermanos y hermanas, para ser hijos de Dios y ser dignos de su amor, debemos tener verdadera vacación, pues nacemos con ella desde el vientre de nuestras madres, pues hay nacen los cimientos, pero esta no se construye sola, ya que un templo no se construye solo de la nada, así es nuestra vocación debe ser construida piedra por piedra y cuáles son las piedras o material a usar para construir tal vocación: El cemento seria lo espiritual del templo, los bloques y ladrillos nuestros actos es decir nuestras acciones, y cuál sería el techo y manto para proteger nuestro templo, nada más y menos que nuestra fe, los adornos y todo lo que lleve adentro de nuestro templo serian nuestras oraciones, rezos y alabanzas, nuestro suelo el cual pisaremos seria lo aprendido de la palabra de Dios y las enseñanzas de nuestro señor Jesucristo.
Fraters y sorores entonces hay tendríamos el gran templo de la vocación para andar por los verdaderos caminos de Dios, y así agradar a nuestro padre celeste. Es muy importante la fe, el creer y confiar, ya que los caminos de nuestro Dios son misteriosos, él tiene el control y es vital tener fe en sus giros y decisiones, pues si dejamos nuestras vidas en sus manos el no querrá daño alguno para nosotros. Eso no quiere decir hermanos míos, que él no los pondrá a pruebas y no los procesara por sus desvíos y malas acciones, todo lo contrario, como buen padre el querrá lo mejor para nosotros y nos pondrá en circunstancias para que abramos el corazón y seamos buenos hijos, sin embargo no lo vean como algo malo véanlo como una bendición, pues debemos discernir el por qué, para comprender que es vital que cambiemos, porque él también nos edifica para que busquemos sus verdaderos caminos esos que llevan a su aprobación y a su gloria.
Recordando hermanos míos que la vocación es un templo el cual debemos construir nosotros mismo con buenos valores, hacer arreglos donde allá que mejorar y mantenerlo para que no se deteriore, entonces comencemos, nunca es tarde para empezar.
✠ Frater: Edward J. Fuentes A.
Humilde servido de la Santísima Trinidad, hermano de lucha, al servicio de Dios todo poderoso.
Semper fidelis, in aeternum.
✠ ✠ ✠ TODO SEA POR LA GLORIA DE DIOS ✠ ✠ ✠
✠ NON NOBIS, DOMINE, NON NOBIS, SED NOMINI TUO DA GLORIAM ✠
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