1 Tú, hijo mío, saca fuerzas de los dones que has recibido de Cristo Jesús. 2 Lo que me escuchaste en presencia de muchos testigos transmítelo a personas de fiar, que sean capaces de enseñárselo a otros. 3 Comparte las penas como buen soldado de Cristo Jesús. 4 Un soldado en servicio activo no se enreda en asuntos civiles, si quiere satisfacer al que lo reclutó. 5 Lo mismo un atleta: no gana el premio si no compite según el reglamento. 6 El labrador que trabaja es el primero en recibir los frutos. 7 Reflexiona sobre lo que te digo, que el Señor te hará entenderlo todo. 8 Acuérdate de Jesucristo, resucitado de la muerte, y descendiente de David. Ésta es la Buena Noticia que yo predico 9 por la que sufro y estoy encadenado como malhechor, pero la Palabra de Dios no está encadenada. 10 Yo todo lo sufro por los elegidos de Dios, para que, por medio de Cristo Jesús, también ellos alcancen la salvación y la gloria eterna. “2 TIMOTEO 2:1-10”
Enseñanza o Reflexión: Hermanos y hermanas, pues la orden esta dicha como buenos soldados cumplamos y hagamos cumplir la palabra de Dios padre y las enseñanzas de Jesús nuestro señor hijo. No caigamos hermanos míos por cosas de la carne es decir lo terrenal, ni nos debilitemos en espíritu, pues mantengamos firmes la fe y fuerte el corazón como buenos soldados de Dios, si llegáramos a caer y nos llegáramos a sentir derrotados, no olvidemos la palabra dicha por nuestro padre celeste y las enseñanzas heredadas de nuestro señor de la cruz, pues también acordémonos de Jesucristo de su pasión, muerte y resurrección, pues apoyarnos en él para así ser levantados ante Dios y continuar su lucha, la lucha de su santa gloria, recordar siempre que Dios nunca abandona.
Fraters y sorores pues aquellos que hoy nos convertimos no solo en hijos sino también en sus soldados desbebemos siempre ir con la frente en alto a tocar los corazones y cambiar vidas de todos, para hacer cambios a la humanidad y así vencer el mal con el bien; y cuál es ese bien, la enseñanzas de las santas palabras para mostrar a Dios al mundo, las buenas obras de caridad, humildad, amor, entre otros, para así erradicar las potestades del mal que destruyen cada vez más a la humanidad llevándola cada vez más a la perdición del maligno. Entonces hermanos míos las buenas obras esas que aborrece el mal y que son nuestras armas más poderosas esas que se hacen con el corazón, con el amor de un padre, madre, hermano, hermana, hijo, e hija, entonces tomemos nuestra espada y escudo y salgamos a luchar.
Hagamos buenas acciones con fe inquebrantables a Dios y a Jesús Nuestro señor, defendamos en la oración por la salvación y el perdón de todos nuestros hermanos. Pues hermanos míos el mal no tiene descanso ni da tregua, por eso esta guerra es una guerra santa, pues nuestras luchas no dan pausa, el enemigo espera lo más débil para hacernos caer y así derrotarnos, entonces tengamos más comunión con Dios, hagamos el bien sin mirar a quien y entreguemos el corazón a la reconciliación, al amor, a la humildad, a la caridad, y a la paz, todos los días para ser buenos y dignos soldados de nuestro padre celeste, para así ser merecedores de su santa gloria.
✠ Frater: Edward J. Fuentes A.
Humilde servido de la Santísima Trinidad, hermano de lucha, al servicio de Dios todo poderoso.
Semper fidelis, in aeternum.
✠ ✠ ✠ TODO SEA POR LA GLORIA DE DIOS ✠ ✠ ✠
✠ NON NOBIS, DOMINE, NON NOBIS, SED NOMINI TUO DA GLORIAM ✠
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